Décadas después del brutal asesinato de sus padres, Lyle y Erik Menéndez siguen cumpliendo cadena perpetua por el crimen. Su alegato de haber sido víctimas de abuso familiar sigue resonando, manteniendo su caso en el centro de atención pública y mediática.
News
More from News
Recommended
You have declined cookies, which means you cannot log in, or use other personalized features of this site. Review our privacy policy.